Jacomé Márquez de Prado, José

Nacimiento: 12/8/1897, Sevilla, provincia de Sevilla

Fallecimiento [?]

Biografía:

Hijo de un coronel de Artillería. Ingresó en la academia de Infantería el 7 de septiembre 1914. Obtuvo el empleo de teniente el 30 de junio de 1919. Ascendió a capitán el 27 de junio de 1924, por antigüedad. A lo largo de 1919 estuvo destinado en Fernando Poó (Guinea Ecuatorial), al mando de la primera compañía que cubría la vigilancia del campamento de internados alemanes del Camerún. Obtuvo el título de piloto el 25 de abril de 1921. En 1923 y 1924 estuvo destinado en Villacisneros y los dos años siguientes en Regulares de Ceuta nº 3. El 22 de enero de 1930 aprobó el curso de observadores de aeroplanos en Cuatro Vientos y Los Alcázares, incorporándose al mando del aeródromo de Villacisneros. Durante la República estuvo destinado en la escuadra nº 1 de Getafe y en la Escuela de Tiro y Bombardeo Aéreo de Los Alcázares, como profesor de tiro. En 1933 había tomado parte como jefe de navegación en el vuelo alrededor de España de la escuadrilla de hidros al mando del comandante Ramón Franco. Por fin el 20 de junio de 1936 se incorporó a la Oficina de Mando de Aviación, el vértice director de la aviación militar española. Allí continuaba sirviendo el 18 de julio de 1936. Los testimonios recogidos en la Causa General respecto de su comportamiento durante los tres días de julio resultan contradictorios. Por un lado se asegura que fue esencial en la oposición a la sublevación militar; por otro, que se vio forzado ante el ambiente hostil y proclive a la República que imperaba en la Oficina de Mando. Ascendió a comandante el 23 de octubre y mantuvo destino hasta el 8 de diciembre de 1936. Aquel día, gracias a su amistad con el coronel Camacho, logró incorporarse a la oficina de compras de París. Aquí surge una historia repleta de lugares oscuros. La documentación no clarifica si Jacomé cometió malversación de fondos, obtuvo comisiones ilícitas o favoreció de alguna forma a los rebeldes. La cuestión es que sus superiores empezaron a sospechar de él y le requirieron varias veces en Valencia para ofrecer explicaciones. Se negó a acudir. Desertó. El 29 de septiembre de 1937 embarcó en Amberes con dirección a Río de Janeiro. Allí se ofreció por carta a las autoridades sublevadas para regresar a España. No recibió respuesta. Continuó exiliado en Brasil, donde abrió una agencia de exportación e importación. Desde luego no andaba escaso de fondos, lo que abunda en las sospechas sobre su actuación en París. El 8 de julio de 1962 volvió a España. El 18 de marzo del año siguiente un consejo de guerra lo condenó a 3 años y 1 día con la accesoria de separación del servicio, lo que le supuso la percepción de una pensión mínima de capitán del Ejército. El 30 de abril de 1963 le indultaron la pena principal.

Fuentes: Ángel Bahamonde Magro. Diccionario biográfico del exilio español de 1939: los militares (Diccionario en preparación)