Basaldúa Ibarmia, Pedro de

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Basaldúa Ibarmia, Pedro de

Nacimiento: 1906, Baracaldo, provincia de Vizcaya

Fallecimiento 1985, Buenos Aires (Argentina)

Biografía:

Empezó muy joven su carrera periodística en su ciudad natal, como redactor de El Galindo y director del periódico La Ribera. La dictadura de Primo de Rivera hizo cristalizar sus creencias nacionalistas y católicas, lo que le llevó a militar en la Agrupación Vasca de Acción Social Cristiana (AVASC) y a colaborar en el semanario Jagi-jagi, órgano de expresión de los «mendigoxales», muy comprometidos con el independentismo vasco, y enfrentados a la línea estatutista del PNV oficial, durante el periodo republicano. A pesar de ser considerado por los «mendigoxales» como afín al sector autonomista, las medidas represivas del Gobierno le convirtieron paradójicamente en el primer redactor de la publicación que fue encarcelado. Tuvo que compaginar esta actividad no remunerada con otras que sí lo estaban, y por ello llegó a miembro del Consejo Político y jefe de la sección de Sociedad y Economía del diario Euzkadi. También dirigió la revista Aberri desde su fundación. A pesar de sus divergencias con la dirección del PNV, participó en la Comisión Propagandística de este partido, así como en el sindicato Solidaridad de Trabajadores Vascos y profesor de la AVASC.
El Bizkai-Buru-Batzar le designó como representante en el Gobierno Civil al estallar la Guerra Civil en julio de 1936, al lado de Heliodoro de la Torre y José Luis Irisarri, siendo nombrado secretario del gobernador civil republicano y presidente de la Junta de Defensa, José Echeverría Novoa. Colaboró en la revista Gudari y, a raíz de la captura de Esteban Urkiaga «Lauxeta», pasó a dirigir la revista Euzko Gudarostea. Una vez aprobado el Estatuto de Autonomía y formado el primer Gobierno vasco, en octubre de 1936 fue nombrado secretario del lehendakari José Antonio Aguirre, a cuyo lado permaneció hasta mayo de 1949. Este cargo le permitió acceder a información muy valiosa y a contactar con distintas personalidades de la época.
Una vez en el exilio, fue delegado del Gobierno vasco en Argentina y uno de los fundadores del Instituto de Estudios Vascos, dirigiendo a partir de 1951 la revista Eusko Deia editada en París. También perteneció a la Sociedad Argentina de Escritores. Regresó temporalmente a España en marzo de 1977 a raíz de la asamblea general del PNV celebrada en Pamplona.
Fue un conferenciante y un escritor prolífico. Escribió Sangre en la mina (1937), El dolor de Euzkadi ((1937), Con los alemanes en París, páginas de un diario (1943), En España sale el sol (1946), Ignacio de Loyola y Francisco Xabier (1946), Situación religiosa de España. Dolorosas realidades (1947), El Estatuto Vasco y la República española (1952), En defensa de la verdad. Los vascos en la Guerra Civil española (1956), Aportación vasca a la Argentina (1957), Crónicas de guerra y exilio (1984). Su obra El libertador vasco. Sabino de Arana (1953), escrita en términos de una ardorosa hagiografía, fue, junto a la de Ceferino de Jemein, una referencia importante en la imagen del fundador del nacionalismo vasco proyectada por este sector durante el siglo xx. [J MSR]

Bibliografía y fuente
Auñamendi Eusko Entziklopedia, «Pedro de Basaldúa Ibarmia», http://www. euskomedia.org/aunamendi/11749.
San Sebastian, Koldo, «Basaldúa: Aguirre no estuvo al tanto de las negociacio- nes con los italianos», Euzkadi, n.º 171, 3 de enero de 1985, pp. 26-29.