Carrillo Domínguez, José
Cargo: Alcalde de San Juan del Puerto (Huelva)
Nacimiento: 1890, Bollullos del Condado, provincia de Huelva
Fallecimiento 21/8/1936, Huelva, provincia de Huelva
Biografía:
José Carrillo Domínguez nació en el año de 1890. Vivía en Bollullos del Condado (Huelva) con sus padres, que eran pañeros. Sus visitas a San Juan del Puerto (Huelva) se debían a su trabajo como representante de tejidos. Allí conoció a su mujer, fijó su residencia y tuvo tres hijos. Conocido como «el inglesito». Tras las elecciones municipales del 31 de mayo de 1931, José Carrillo fue proclamado alcalde el 5 de junio siguiente con el voto de 8 de los 12 concejales que constituían la corporación. En posteriores actas de sesiones se refleja su preocupación por los asuntos sociales y educativos: subvención a personas pobres, la adquisición de una “Biblioteca de la Casa Espasa-Calpe” o la subvención a las dos nuevas escuelas creadas por el Estado. Procura el equilibrio entre la tolerancia hacia la práctica de la religión católica y el respeto a las leyes vigentes en cuanto a la laicidad del Estado, prohibiendo la manifestación pública del culto en relación con los entierros, del mismo modo que posteriormente, en el 36, volverá a dar muestra de su sentido de la justicia y su tolerancia al ayudar a salvar la vida de gentes de derecha ante exaltados llamados de izquierda. En 1933 defiende los beneficios económicos que podría reportar al pueblo la instalación de una fábrica para elaborar pasta de papel. Finalmente, se crearía dicha fábrica, aún en funcionamiento, en 1957. El 29 de septiembre de 1934 José Carrillo ha de afrontar una denuncia de malversación de fondos. Por unanimidad se resuelve como injuriosa e injustificada. El denunciante, D. José García Tayllafert, sería luego nombrado (sesión extraordinaria de 10 de octubre) alcalde de San Juan por el nuevo Gobernador civil, afín al también nuevo y derechista gobierno central. Sin embargo, tras el triunfo del Frente Popular en las elecciones generales, el Gobernador ordenaría el cese de la corporación y la restitución de la corporación surgida del voto popular, situándose de nuevo a la cabeza D. José Carrillo Domínguez el 20 de febrero de 1936. El ex-alcalde García Tayllafert es acusado de prevaricación, pero la corporación actual manifiesta confiar en la justicia y, por tanto, no personarse en el sumario, aunque sin renunciar a la indemnización que correspondiera al Ayuntamiento. El 2 de mayo de 1936, habida cuenta de que el Estado no se hace cargo de la construcción del Grupo Escolar, la corporación decide afrontar los gastos en un presupuesto extraordinario. El 4 de julio el Ayuntamiento decide solicitar a los ministros de Instrucción Pública y de Hacienda incluya en los nuevos Presupuestos Generales el cargo de las casas-habitación para los maestros nacionales, ya que es una carga elevada para el Ayuntamiento. Es el último acta que firma José Carrillo, aunque presidió también la sesión del 11 de julio. Tras el golpe del 18 de julio, el día 29 se constituye nuevo Ayuntamiento por orden del Sr. Comandante del Puesto. Se suceden expulsiones y sustituciones de funcionarios en todos los niveles: médico, veterinario, limpiadora, etc. Se constata el paradero desconocido de algunas personas. El 21 de agosto se destituye al médico por haberse ausentado de su cargo y por frecuentar anteriormente amistades “elementos marxistas locales”, entre los que se cita al “Alcalde Carrillo”. Eran días de fusilamientos y fosas comunes, días en que el camino de la Soledad, como llamaban al camino entre la ciudad de Huelva y su antiguo cementerio era tristemente frecuentado. Como le ocurrió al Alcalde Carrillo, en compañía de dos amas de casa y dos jornaleros. Sucedió que uno de esos días fue encontrado en Huelva por miembros de Falange. Al enterarse de su captura, Antonia (su mujer) y sus hijos, que se habían quedado en San Juan, fueron a Huelva a suplicar clemencia y justicia a las autoridades, pero sus súplicas y la búsqueda de la influencia de un amigo militar, quien ya lo había sacado de la cárcel unos días antes, no fueron suficientes para evitar el fatal desenlace de la vida de este hombre, defensor de los valores democráticos y la tolerancia, en la triste noche del 21 de agosto del triste verano del 36.
Fuentes:
José Carrillo Yáñez. José Carrillo Domínguez