Llegada a la Fundación Pablo Iglesias de la documentación procedente de la URSS

En junio de 1978 se celebró en Moscú un congreso de instituciones para el estudio del movimiento obrero donde acudió Enrique Moral Sandoval en representación de la Fundación Pablo Iglesias, recién constituida. Tras entrevistarse con Vladimir Pertsov, miembro del PCUS especializado en temas españoles, se admitió la existencia de un fondo documental socialista y se acordó su devolución a finales dicho año. En cambio, las autoridades soviéticas tardarían cerca de 3 años más en recopilar todo el material documental, que se encontraba disperso en varias instituciones, llegando a España el viernes 3 de julio de 1981 acompañado por el propio Pertsov. El 9 del citado mes se realizaría la entrega oficial al PSOE.

Esta documentación había llegado a manos de la URSS después de que Ramón Lamoneda, a petición de la dirección del partido, lograra sacarla de España en 1939 con destino a París, donde se entregó en depósito para su custodia a la sección francesa del Instituto Internacional de Historia Social. El comienzo de la segunda guerra mundial y la invasión Alemana de Francia llevó a los responsables del Instituto, Posthumus y Boris Nicolaesvsky, a trasladar la documentación de España, junto con otras muchas, a un depósito secreto en la localidad francesa de Amboise. Pese a su empeño, en junio de 1940 las tropas alemanas se incautaron tanto de los fondos existentes en París como de la documentación de Amboise y la trasladaron a Alemania. Una vez allí la pista de cómo llegó la documentación a Moscú se pierde, aunque lo más plausible es que se encontrara en alguna ciudad germana importante que cayese en manos del ejército soviético al finalizar la guerra y llevados como botín de guerra al Instituto Marx-Engels-Lenin, dependiente del PCUS.

Al llegar la documentación a la sede de la Fundación Pablo Iglesias comenzó el arduo trabajo de catalogarla al encontrarse toda ella desordenada. Para responder al interés creado en los investigadores se acometió la tarea de ordenar toda aquella documentación que más fácilmente pudiera realizarse, como fue el caso de las actas de la Comisión Ejecutiva, Comité Nacional y Grupo Parlamentario del PSOE (1931-1939); las actas de constitución de las agrupaciones socialistas (1937-1939); y los expedientes de documentación de las Federaciones Provinciales Socialistas (1937-1939). La ordenación del resto de la documentación concluyó en 1986, tratándose de dos bloques principales: Archivo del PSOE (1936-1940) con documentación desde 1931, como es el caso de las actas de la Comisión Ejecutiva, Comité Nacional y Grupo Parlamentario del PSOE (70% del total); y el Archivo de la UGT 1936-1939 (30% del total).

 

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